Nuestra historia
Dos cuarentones en crisis decidimos dar un giro radical a nuestras vidas mientras compartíamos unas chuletillas de lechazo segoviano bien regadas con un borgoña.
Así empezó la historia.
Hoy, con la misma esencia y el mismo amor por la cocina de verdad, una nueva generación toma el relevo. Con ideas frescas, respeto por lo auténtico y muchas ganas de seguir cocinando historias alrededor de una buena mesa.
La Taberna de Perorrubio sigue siendo lo que siempre fue: un lugar con sabor, con historia y con ganas de seguir sorprendiendo.
La historia... continúa a fuego lento.